«El médico sabio prevé la enfermedad lejana. El médico mediocre prevé la inminente. Y el médico malo, cura la presente». Proverbio chino. Resulta evidente que para poder curar o aliviar a una persona, debemos por encima de todo, observarla atentamente para conocer cuál es su auténtico problema. Para ello, el ser humano ha ideado un gran número de métodos y sistemas para anticiparse a la aparición de la enfermedad o en su defecto, para poder conocer con el máximo lujo de detalles los vericuetos de ésta.