Los retos del Tercer Milenio.
El nivel evolutivo de la humanidad actual es similar al del feto en el noveno mes del embarazo. En esa fase de gestación intrauterina sólo existen dos posibilidades para el feto: nacer a una vida nueva; morir en el vientre materno. La humanidad ha avanzado más técnica, que éticamente. Hoy dispone de medios nucleares para autodestruirse globalmente. Pero carece de ideas e ideales para relacionarse más sabiamente con la naturaleza, con sus semejantes, con Dios. De una nueva capacidad espiritual y mental para interaccionar con su entorno físico, humano y divino, dependen su supervivencia y su calidad de vida futura. Son necesarios y urgentes tres nuevos modelos de relaciones humanas: 1. Nuevas relaciones: hombre-naturaleza. 2. Nuevas relaciones: hombre-mujer. 3. Nuevas relaciones: hombre-Dios.